lunes, 7 de febrero de 2011

XVII

El asesino, contratado por sus mocasines en algún rincón marginado de adictos, coquetea en silencio con su víctima a través del caleidoscopio de juguete. Se siente cerca, eufórico y penetrante. En anteriores escenas había llegado al orgasmo. Aunque esta vez, su placer no podía escapar por su pene explosivo.
El gatillo no está preparado para pezuñas astilladas. Tampoco para niños, con conflictos edípicos, que lanzan piedras cuando la habitación queda cerrada con seguro, o patalean la televisión cuando observan alguna cría de canguro en National Geographic . Pero tranquilícense, es una simple opinión, la calificación reconoce que es apta para todos los públicos.


(Extraños)

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Licencia Creative Commons
El Yugo Eléctrico de Alicia se encuentra bajo una LicenciaCreative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 3.0 España.