porque nuestros hijos serán conscientes
de que todo fue por ello,
porque nuestros nietos sentirán latentes
el matiz de lo bello
en nuestro vuelo
por este cielo
gris total
-de tajín-
hacia el emotival
trajín
del sino
argentino.
Por el vocablo
libertario y sin dinero,
por el intacto retablo
del quejío señero
en la laringe queda,
por la seda
sobre la estraza,
por la hogaza
en las manos labriegas
por el Rock’nd
Paul…
A Pablo,
a Venegas,
a Rafa Caballero…
A la ciudad,
a los amigos,
a La Beatriz Mitad